¿Cuándo puedo practicar deporte tras el parto? ¿Cuánto tiempo tengo que esperar? ¿Es bueno practicarlo? ¿Cómo vuelvo o qué tipo de ejercicios son los más adecuados? Estas son algunas de las preguntas que me hacen muchas pacientes en la consulta, amantes del deporte o personas que quieren trabajar en su forma física. En este post vamos a repasar las claves de esta consulta frecuente para comprobar cual es el modo más adecuado para retomar la práctica deportiva.
Lo primero que hay que tener en cuenta es que cada mujer es diferente. Practicar deporte tras el parto dependerá de cada mujer y del tipo de parto, porque no es lo mismo una cesárea que un parto vaginal o instrumental. Lo que sí es cierto es que hay que esperar un periodo de tiempo para volver a practicar deporte tras recuperarse del parto. En la cuarentena (seis – ocho semanas tras el parto) no aconsejo realizar un ejercicio físico intenso, ya que es un periodo delicado donde el cuerpo todavía se está recuperando de todos los cambios. Podría ser perjudicial para la salud de la mujer. La paciencia es, sin duda, un valor fundamental para recuperar la forma física tras el parto.
Tipo de ejercicios que puedes hacer después del parto
¿Cuáles son los mejores o los peores ejercicios tras el parto? Como hemos mencionado anteriormente, dependerá de cada persona, pero es fundamental que la vuelta al deporte sea progresiva. Puedes empezar en casa con pequeños y suaves ejercicios e ir incorporando el gimnasio poco a poco.
Hay que iniciarse de nuevo en la actividad física de manera progresiva. Por ejemplo, comenzamos mejor con pequeñas etapas de carrera suave, unos 100 metros en piscina o prácticas como el pilates o el yoga, que jugar un partido de fútbol o acudir a una clase de zumba que implique saltos y mayor intensidad. Poco a poco, con el paso de las semanas, aumentaremos el ritmo de la práctica deportiva, hasta llegar al ritmo que teníamos antes del embarazo.
Los ejercicios de Kegel para el suelo pélvico son idóneos en las primeras semanas. Esta zona es clave. Un consejo básico es evitar los abdominales clásicos, ya que suponen un gran esfuerzo. Es preferible optar los los abdominales hipopresivos como ejercicios de recuperación de suelo pélvico. En este tipo de ejercicios en en vez de comprimir los músculos abdominales, los estiras a través de la respiración hipopresiva o apnea (aguantando la respiración), trabajando con el diafragma y la caja torácica. También, trabajar la zona de glúteos, las caderas y el pecho en esta primera etapa de posparto resulta fundamental. En estos primeros días también es bueno que pasees con tu bebé unos 20 minutos, te puede ayudar mucho y es un ejercicio muy positivo y saludable.
No obstante, al margen del ejercicio, para estar saludable resulta necesario tener buenos hábitos en la alimentación y en el descanso. Pero recuerda, que la intensidad de la actividad física tiene que ser progresiva, de suave a moderada. No te obligues a esforzarte más de lo que debes y puedes.